Mi nombre es María Saiz, actualmente me encuentro cursando el 4º curso del Grado de Comunicación Audiovisual en la Universitat de València. Realicé mis prácticas curriculares en Bounsel y, la verdad, es que ha sido una de las experiencias más enriquecedoras que me llevo de la carrera.
Desde pequeña siempre me ha gustado hacer fotos en todos los viajes que hacía con mis padres, grababa los lugares que visitábamos y luego lo colgaba todo en la red social que por aquel entonces se estilaba. Unas navidades mis padres me regalaron una cámara de fotos más profesional, y recuerdo que desde aquel día la cámara me ha acompañado a todas partes.
¿Por qué me decidí por Bounsel?
Mi idea principal era cursar mis prácticas en una productora, pero con la situación de pandemia que vivíamos todas estaban paralizadas. Así que miré las opciones que ofertaba la UV, y descubrí Bounsel. Cuando leí las actividades a realizar, me gustó mucho la diversidad de tareas que ofrecía y la libertad a la hora de ejecutarlas. Lo que más me llamó la atención fue la pieza audiovisual que se proponía como proyecto final de prácticas. De manera que no lo pensé dos veces y contacté con Pilar.
Los primeros días todo era nuevo para mí. No estaba familiarizada con términos tan tecnológicos y digitales, por lo que tuve que informarme y aprender más sobre ello. Mis tareas principalmente se basaban en la redacción y generación de contenido para las redes sociales y para el blog, con el fin de alcanzar la máxima difusión.
Para mí, realizar las prácticas en Bounsel ha sido todo un reto, ya que me he enfrentado a un campo completamente desconocido para mí, he salido de mi zona de confort para adentrarme en el mundo del legaltech y conocer cómo la tecnología puede facilitar y mejorar la vida de las personas en el ámbito tanto laboral como personal.
¿Qué me han aportado estas prácticas?
Como ya he comentado, durante mi estancia en la startup me he nutrido de nuevos conceptos y conocimientos que nunca antes había contemplado. He trabajado en equipo con personas totalmente diferentes, pero todas ellas maravillosas, que me han ayudado y apoyado en todo. He creado, además de un vínculo de trabajo, una amistad que me llevo conmigo y por la cual siempre voy a estar agradecida, así como por la confianza que me han brindado para desarrollar mi propio proyecto que pronto saldrá a la luz. Sin duda, ha sido una aventura que repetiría una y mil veces más.
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